Rss Feed
  1. Crisis y oportunidad de cambio.

    jueves, 17 de enero de 2013


     Uno de las  muchos aspectos positivos que cuenta nuestro trabajo es el poder conocer a mucha gente diferente  con la que hablar y poder reflexionar en esos momentos tan relajantes para una mujer u hombre como pueden ser el ir a la peluquería,  y una de esas personas diferentes y que te aporta mucho es Sofía.
    Por ello hoy estamos de enhorabuena en nuestro blog ya que traemos una invitada de excepción, que ha querido compartir con tod@s nosotr@s  toda su experiencia y su “poder” positivo para en unos momentos tan complicados para much@s,  como son los actuales,  intentar darnos unos consejos para conseguir transformar nuestras actitudes y convertirlas en oportunidades.
    Muchas gracias Sofía Prieto por tu artículo y desde aquí os invitanos a que leáis más sobre ella en su blog Psicología Sistémica.
    Dedicado para tod@s:


    Crisis también es una oportunidad de cambio.

    Nos estamos acostumbrando a escuchar palabras como, la “crisis económica”, “crisis del Real Madrid”, “crisis de pareja”, “crisis personal”, etc., y lo relacionamos con que  algo negativo, muy negativo, está ocurriendo. Pero no es del todo cierto.
    En Occidente la palabra crisis tiene esa connotación negativa, en cambio, en la cultura Oriental crisis es una oportunidad de cambio. De hecho, no hay un cambio si no se ha producido una crisis anterior que nos hace pensar que algo diferente tenemos que hacer.
    Nos está afectando mucho esta corriente negativa de la palabra crisis. Y dirigir el pensamiento hacia la parte negativa, produce inseguridad, miedo, angustia, cambios de humor, e incluso cambios de conducta graves como desarrollar una adicción.
    Y esto no sólo a nivel personal sino también a nivel social y sobretodo laboral, podemos caer en la trampa de estar pendientes SOLO de lo negativo de la situación y estancarnos en un círculo de malestar.
    Utilizar sólo la parte negativa en el ámbito laboral, con o sin trabajo, nos puede llevar a un estado de ansiedad producido por miedos, entre los cuales se encuentra el miedo a la pobreza.
    Bajo un estado de ansiedad no podemos tomar decisiones con tranquilidad, podemos salir de este estado alejándonos temporalmente de aquello que sea negativo para nosotros.  El pasado no podemos modificarlo pero sí podemos modificar pequeñas cosas del presente para incidir en un futuro próximo.

    Y tenemos que entender que entramos en este estado de ansiedad debido a toda la información que estamos recibiendo de nuestro entorno, y que es nuestra responsabilidad quedarnos en este estado negativo o empezar a introducir pequeños cambios que nos permitan encontrar soluciones.
    El individuo no es un ser pasivo y dominado sino un actor protagonista de su propia vida con la capacidad de decidir qué actitud quiere tomar ante la vida.

    Os propongo pequeños cambios para afrontar esta, nuestra crisis:

    ·    EVITAR comentarios negativos que no van a ningún sitio, tanto propios como ajenos.
    ·   No entrar en conversaciones que se hable de lo mal que está determinada persona sin que esté esta presente.
    ·   Dedicar un pequeño espacio de tiempo diario a las noticias (prensa, T.V., radio),  el suficiente para saber lo que está pasando en el día, pero cuando aparezcan signos de ansiedad, dejarlo y cambiar de tarea.
    ·   Decir “TODO ESTÁ FATAL” no ayuda. Ofrecer CRÍTICAS CONSTRUCTIVAS a lo que está ocurriendo.
    · Cuidar nuestra imagen. Sentirnos bien nos da seguridad. Sin darnos cuenta transmitimos lo que sentimos.
    ·     VALORAR todos los esfuerzos que hacemos diariamente. La búsqueda de empleo es también un trabajo (no remunerado) que requiere de tiempo y organización. Y esto tiene mucho valor personal.
    ·    BUSCAR respuestas.
    ·  BUSCAR el contacto de aquello que nos anima (familia, amistad, series, música, lectura, etc.).  Hacer cosas que nos gustan todas las semanas.
    ·    Pensar que la crisis es un proceso de transición hacia nuevos cambios. No es para siempre.

    En esta época de crisis más que nunca, necesitamos rescatar nuestro poder. El poder de esas pequeñas cosas que no dependen de nada más que de nosotros mismos.



  2. 0 comentarios:

    Publicar un comentario